Las finales son crueles cuando se pierden. Afligen al que se queda sin la gloria. Le tocó al Athletic, que de nuevo saboreó la amargura en Vera, una localidad costera y vacacional. La entidad rojiblanca se quedó sin su décimo título de Copa juvenil tres años después de aquel momento mágico de Almuñécar ante el mismo Real Madrid, que ayer se tomó su particular venganza. Raúl de Tomás, Cristian Benavente, por partida doble, y Carrallo finiquitaron a los rojiblancos, a los que les penalizó su flojera defensiva en un maldito cuarto de hora en el primer periodo. El Athletic, por tanto, se llevó un pequeño varapalo en sus entrañas, aunque la derrota, dañina por su contundencia en el marcador, no estropea una magnífica campaña de los de Suances, que han reivindicado una generación, la del 95, que está llamada a proporcionar mimbres de futuro al primer equipo, la verdadera razón de ser de la cantera.

vía Un final muy cruel . Deia. Noticias de Bizkaia...