El Athletic despide 2107 emitiendo un profundo suspiro de alivio. Igual que la afición, que asistió con el estómago encogido a un partido mal gestionado y con final feliz. Pese a jugar una hora con un hombre más y con ventaja en el marcador, el equipo de Ziganda las pasó canutas…
a través de Deia, Noticias de Bizkaia