Una vez concluido el partido entre Athletic Club y Real Madrid, la afición rojiblanca abandonaba San Mamés con la sensación de haber dejado escapar dos puntos. Eduardo Berizzo había conseguido con su planteamiento poner en serios aprietos al cuadro merengue, que acabó logrando el empate en el único error de concentración que tuvieron los leones en los 90 minutos…

a través de Marca.com